La Iglesia en salida es la comunidad de discípulos misioneros que se involucran , que acompañan, que fructifican y festejan. Papa Francisco

La liturgia , obra de Cristo , es también una acción de su Iglesia. Realiza y manifiesta la comunión entre Dios y los hombres. Introduce a los fieles en la vida nueva de la comunidad mediante una participación "consciente , activa y fructífera ". Debe ser precedida por la evangelización , la fe y la conversión .

Los documentos del Concilio Vaticano II la definen como " la cumbre a la que tiende la acción de la Iglesia y, al mismo tiempo, la fuente de donde mana toda su fuerza ". Por tanto, es el lugar privilegiado de la catequesis del Pueblo de Dios .

La catequesis está intrínsecamente unida a toda la acción litúrgica y sacramental , porque es en los sacramentos , y sobre todo en la Eucaristía , donde Jesucristo actúa en plenitud para la transformación de los hombres .

La catequesis , además de propiciar el conocimiento del significado de la liturgia y de los sacramentos , ha de educar a los discípulos de Jesucristo para la oración , la acción de gracias , la penitencia , la plegaria confiada , el sentido comunitario , los símbolos , ya que todo ello es necesario para que exista una verdadera vida litúrgica .

En la liturgia hablamos de "celebrar , celebración , celebrante" , como también lo hacemos en la vida social cuando nos referimos a una fiesta , cumpleaños , triunfos , bodas. Cuando celebramos el misterio cristiano nos referimos en particular al Misterio Pascual. Además de los ritos exteriores que acompañan una celebración , se da una realidad interior , tanto de Cristo como de las personas que celebran.

Nos dice el Santo Padre Francisco : " La Iglesia en salida es la comunidad de discípulos misioneros que se involucran , que acompañan , que fructifican y festejan .(...) La comunidad evangelizadora gozosa siempre sabe "festejar". Celebra y festeja cada pequeña victoria , cada paso adelante en la evangelización . La evangelización gozosa se vuelve belleza en la liturgia en medio de la exigencia diaria de hacer el bien . La Iglesia evangeliza y se evangeliza a sí misma con la belleza de la liturgia , la cual es también celebración de la actividad evangelizadora y fuente de un renovado impulso donativo ."

Por Cristina Cardós de Santelli